Para jugarle al emprendedor hay que registrarse al SAT
Ser emprendedor es lo de hoy. Es bonito y está bien pero hay una lista larga de tareas por cumplir para ser nombrado como un emprendedor cien por ciento real, no fake.
Registrarte ante el SAT será uno de los pasos más importantes en tu proceso como emprendedor.
Recordemos la frase:
Un gran poder conlleva una gran responsabilidad
¿Cuándo me registro?
Es fácil, la inscripción en el RFC debes hacerla el mismo mes en que inicies operaciones.
Por ejemplo: Si inauguraste tu negocio a inicio de mes, tienes todo ese mes para darte de alta.
Tu inscripción la puedes hacer como persona física o como persona moral y el régimen depende de la actividad que vayas a realizar:
¿Qué es una persona moral?
El SAT reconoce a las personas morales cuando se unen dos o más personas por un fin común, (puede ser o no lucrativo).
Pueden ser empresas, ONG’s, negocios, etcétera.
¿Qué es una persona física?
Es un individuo, una sola persona (no es empresa, no es sociedad, eres tú mero).
Un vendedor, un comerciante, un empleado, un freelance.
Los beneficios de registrarse ante el SAT
El tío SAT no es la persona más querida del mundo pero la verdad es que te conviene estar registrado formalmente. Aquí algunas razones por las que te conviene llevar la fiesta en paz con él:
- Podrás deducir tus facturas. En éstas se desglosan los impuestos correspondientes que tienes que pagar pero al mismo tiempo podrás recuperar parte del dinero que factures (es decir, recuperarás parte de tu dinero por devolución de impuestos).
- Alguien que es ‘formal’ atrae a clientes potenciales y esto también ayuda a garantizar la calidad a los consumidores. Es un win-win.
- Al registrar tu marca, cuentas con una protección jurídica que te garantiza el derecho exclusivo a utilizarla para identificar bienes o servicios. Si no se registra podría ser registrada por otra persona.
- Si así lo quieres, podrás adquirir una línea de crédito para financiar el crecimiento de tu empresa/proyecto.
- Tendrás chance de cobrar regalías a quienes utilicen tu marca y cederla a quien o quienes creas conveniente.
- Por ejemplo, Si quieres presentar tu proyecto en Shark Tank. tendrás que estar registrado ante Hacienda porque no aceptas negocios 'informales'.